Christchurch es uno de los lugares más castigados por los terremotos en los últimos años y por ello su catedral se encuentra en plena fase de restauración. Mientras que los ciudadanos tienen la posibilidad de acceder a su catedral original, un arquitecto japonés está llevando a cabo la construcción de una nueva y muy curiosa catedral. La curiosidad de esta construcción radica especialmente en el material que se está usando, ya que es una catedral de cartón.
Simple cartón es el único material que se está usando para llevar a cabo la construcción de esta catedral en este punto de Nueva Zelanda, con el objetivo de ofrecer a todos los ciudadanos un lugar de culto mientras que no tienen terminada la catedral que fue azotada por el terremoto de las últimas fechas y que lógicamente ha dejado dañada notablemente la catedral de esta ciudad de Nueva Zelanda y al menos los ciudadanos tendrán una catedral alternativa.
Con simples tubos de cartón este arquitecto espera poder tener en breve la nueva catedral, un lugar de culto que podrá albergar nada menos que 700 personas, que es una cifra realmente muy elevada para tratarse de una construcción de cartón. Seguramente cuando se construya se pueda convertir en un nuevo reclamo turístico para que los turistas puedan disfrutar de esta gran obra de arte con un material tan simple como es el cartón. Se espera que en el mes de abril la catedral abra sus puertas en Christchurch, donde están realmente sorprendidos por esta obra del arquitecto japonés.