Nueva Zelanda es líder de su continente pero aún tiene que ganar a uno de los clasificados de Asia para llegar al mundial. Es muy injusto que un continente se pueda quedar fuera del mundial, pero así son las cosas y son los equipos europeos los que se llevan las mayores plazas y lógicamente los que ganan muchos mundiales. Nueva Zelanda está esperando al 9 de septiembre para conocer su rival, que puede ser Arabia Saudí o Bahréin, pero igualmente son rivales más o menos sencillos.

Todo parece indicar que Nueva Zelanda podría estar en el mundial y sería un gran logro, porque una selección tan humilde y con tan pocos recursos se merece estar en el mundial, después de ser campeona de Oceanía, donde no hay grandes selecciones y donde Nueva Zelanda suele destacar casi siempre. Esta eliminatoria para el mundial tendrá lugar en octubre y noviembre, porque es un partido a ida y a vuelta. Nueva Zelanda tiene en su mano poder llegar al mundial, que es una cita muy atractiva.

Ambos rivales tienen la misma complicación, aunque puestos a elegir, quizás Bahréin sea una selección de menor rango y pueda ser algo más sencilla, ya que Arabia Saudí tiene cierta experiencias en estas eliminatorias y ha estado alguna vez en el mundial, aunque con nefastos recuerdos tras una serie de goleadas. Nueva Zelanda tendrá que enfrentarse a una de estas dos selecciones, para finalmente clasificarse para el mundial, que sería una muy buena noticia para esta selección y para el país.