Una desagradable sorpresa es la que se han encontrado unas personas en la costa de Nueva Zelanda, sobre todo teniendo en cuenta porque esta sorpresa consiste en un grupo de ballenas muertas, que por desgracia se quedaron atrapadas en la poca profundidad del agua de esta zona de la costa de Nueva Zelanda. Cuando los voluntarios han llegado no han podido hacer nada por salvar la vida de la ballenas, algo que por desgracia es muy habitual en la costa de Nueva Zelanda.

Además del grupo de 50 ballenas muertas, los voluntarios han podido ayudar al menos a 15 ballenas a salir de las aguas poco profundas, debido a que en esta zona de Nueva Zelanda es muy común que las ballenas se queden varadas por la poca profundidad y en pocas horas se quedan sin oxígeno y se secan, por lo que es una muerte segura salvo que alguien pueda conocer la situación de estas ballenas. Esta zona se encuentra al norte de la isla del norte de Nueva Zelanda y es una pena que se den este tipo de casos tan habitualmente.

Lo peor de todo es que no siempre se puede descubrir a tiempo que las ballenas han quedado varadas y el tiempo de actuación es muy corto, porque en pocas horas de estar fuera del agua es cuando mueren. El espectáculo de muchas ballenas muertas es realmente desagradable, mucho más cuando estos voluntarios trabajan durante el año para poder ayudar a las ballenas y en otros muchos casos.

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